Villajoyosa
Ciertamente nada tienen que ver estos dos veranos que me ha dado trabajo la Generalitat con los que me ha dado el Sescam, y mira que a mí me gusta Castilla-La Mancha, pero aquí, no sé si por el ambiente playero, es una mezcla entre trabajar y vacaciones. Y este año más aún, porque después de vivir siete meses explotada, trabajar siete o diez horas al día para mí es como estar de vacaciones.
En un día libre que se me ha quedado por ahí colgando suelto he ido con Mamá Zombi a Villajoyosa, La Vila Joiosa en Valenciano o La Vila para los lugareños. De ahí sólo sabía que había un hospital en el que a las enfermeras suturan (no como en Alicante que los médicos residentes acaparan todo lo guay), una parada del tranvía y casitas de colores. Pero yo era ajena algo muy importante de ahí: una gran tradición chocolatera. Ahí es donde se fundó la marca Valor y Clavileño y es en la fábrica de Valor donde han hecho ★ El Museo del Chocolate ★ donde cada hora hacen una visita guiada
¡¡¡¡GRATIS!!!!
¡¡¡¡CON DEGUSTACIÓN!!!!
Madre e hija |
Es tan genial como suena. Sin trampa ni cartón: degustación gratis, mi pareja de palabras favorita *¬*. Si viviera ahí iría todos los días. En parte estoy triste porque ya no tengo metas en la vida.
Tras visualizar vídeos y oír historias de suculento chocolate visitamos la fábrica mientras que ese olor lo embriagaba todo. Y, cuando ya estábamos desesperados por devorar algo de ese placer adulto del que tanto hablaban, nos dieron paso a la degustación. Yo no sé si por todo lo que habíamos salivado o porque en la degustación ponían chocolate especialmente bueno, pero a mí ni en Bélgica me había estado tan bueno un chocolate. Comimos tanto que nos daba ya un poco de vergüenza.
Hasta comí chocolate puro que nunca me ha gustado y me encantó. Yo no sé qué clase de locura chocolatera ocurrió ahí dentro. Me dieron pena porque yo creo que nadie compró nada puesto que fuera hacía un calor de mil demonios y todo se derretía. Pero yo sigo siendo del Team Chocolates Amalia, ¿eh?
El pueblo pensaba que sólo tendría casitas de colores junto a la costa, pero no, todo el casco antiguo es así y es chulísimo.
Tiene una playa de arena y varias de rocas y por ahí pasa el tranvía que va por la Costa Blanca, que me encanta porque vas todo el trayecto viendo el mar. La ida y la vuelta en tram me costó 4 euros y pico desde Alicante, que es casi lo mismo que tres billetes de autobús urbano por Alicante. Estoy muy indignada con el precio de los autobuses aquí, por si nunca os lo he dicho.
Está al ladico de Benidorm, de hecho el islote ése que hay en frente de Benidorm se ve de culo.
En resumen, que Villajoyosa tiene toda la pinta de ser un sitio ideal para veranear (o que te den un contrato de verano, ejé), a pesar de la aglomeración de gente que hay en estas playas.
Comentarios
A ver si me presentas al amor ese de tu vida.