Viaje a Chelmsford

No sé por qué sigo haciendo entradas de estas con mil fotos porque siempre acabo reñía con Blogger porque es una mierda.

Dicho esto, este fin de semana lo he pasado con la Calabaza, la Duquesa de Ascot y Culete Segundo. Ha sido muy divertido y aunque corto ha sido intenso.

Cogí el tren de Bournemouth a Oxford (ciudad actual de la Calabaza). Durante el camino me comí este extraño y obsceno alimento de jamón york y queso.

Una de mis mayores aficiones es probar cosas extrañas así es que aquí soy muy feliz porque las cosas normales de aquí son muy raras.

En Oxford tenía que esperar a que la Calabaza saliera de trabajar. Mi plan era hacer turismo. Menudo crimen sería ir a Oxford y no ver la Universidad y los monumentos. 

El Castillo de Oxford

O eso pensaba yo hasta que llegué, se hizo de noche, no había luz por las calles y estaba todo lleno de mendigos que me hablaban (remarquemos que es perturbador que un inglés que no te conozca te hable porque nunca hablan con desconocidos). Es increíble la diferencia abismal de clases que hay en esa ciudad. Así pues terminé esperando a la Calabaza en una cafetería, donde no llovía ni hacía frío. Con un brownie el tiempo pasa más rápido.

Decidle hola a mi paraguas de la Barbie.

Cuando la Calabaza salió de trabajar en su coche del espacio nos dirigimos a Chelmsford (ciudad al noroeste de Londres donde residen la Duquesa de Ascot y Culete Segundo).

Pasamos al lado de Wembley

La Duquesa y Culete nos acogieron en sus senos y nos nutrieron con suculentos desayunos acompañados de The Big Bang Theory.

Ah, sí. No hay que olvidar el fantástico pijama de la Calabaza.

No sé qué da más miedo si el sujeto anónimo del primer plano o la aparición del segundo plano

Si alguna vez os habéis preguntado cómo es la Calabaza en la cama (pregunta que sé que os formuláis a diario) ahora ya sabéis que es una fiera en la cama.

Chelmsford, además de ser la ciudad  en la que nació la radio, es bonica.

  

 

La casa del tío Phill

Arbol macho

Mención especial a la mejor tienda de chuches en la que he estado nunca.

NeoJín sería tan feliz aquí...

Y creo que por hoy ya está.

 Fin.