Misión Gibraltar

Bienvenidos a vuestro blog de viajes en el espacio-tiempo favorito:

Traigo buenas nuevas. Me complace comunicaros que me hallo en la bella ciudad de Bournemouth (también conocida como Voldemort). Es una ciudad ni muy grande ni muy pequeña del sur de Inglaterra llena de estudiantes de todos lados. El gobierno británico cree que estoy aquí haciendo un curso de inglés. La realidad es que estoy en una misión secreta para reconquistar Gibraltar y convertirlo en una región que pasará a depender de Albacete. Usaremos los monos para fabricar navajas al por mayor y después los entrenaremos como mortíferos mercenarios armados con dicha arma blanca. Es nuestro plan para gobernar el mundo e imponer el Miguelito como moneda de cambio. Está todo pensado.

Mi vuelo era con Ryanair. Ya os podéis imaginar la risa que me daba cuando cada semana iba oyendo nuevas noticias de problemas con los vuelos de esta compañía. Os recomiendo encarecidamente que NO voléis con ellos. Principalmente si amáis vuestras vidas. Segundariamente si no queréis sufrir la paliza publicitaria a la que te somenten en la página web y durante el vuelo (yo estuve a punto de comprar una maleta sin darme cuenta y reservé un asiento pagando 10 euros más pensando que no tenía otra opción). Además hubo una cosa que me resultó mosqueante. A lo mejor es normal, no lo sé porque no he volado tanto. Durante el viaje hubo un cambio de presión bastante notable. Yo  no entiendo de aeronáutica (confío en que algún lector lo haga para aclararme la duda) pero si la cabina está presurizada, ¿por qué la botella que llevaba se hinchó al subir y se quedó aplastada al aterrizar? ¿y por qué la tinta de mi pilot empezó a emanar que aquello daba gusto verlo? Hubo más cosas, pero eso fue lo que más me llamó la atención.

Salí de Alicante con 26º y un sol de justicia y llegué en dos horas a Bournemouth con 11º, de noche y lloviendo. Cuando llegué mis padres adoptivos ingleses estaban esperándome. Mi mamá es lo mejor. Me habla constantemente y es adorable a rabiar. Su marido y sus hijos me ignoran un poco, pero ella lo compensa todo. Ella y su nieta, una niña de 3 años que es AMOR. En la casa hay otro estudiante Español. Él tampoco me ignora, es bastante simpático de hecho.

Mi habitación es bastante pequeña pero tiene una ventana en el techo desde la que se ven las nubes y la luna y a veces los arco iris *_*.

Desgraciadamente no tiene persiana y por las mañanas me siento como un vampiro cuando sale el sol.

Por las mañanas además de hacer el vampiro voy a clase de inglés. Mi facilidad para relacionarme con las personas sumada a que huyo de los españoles (que están por todas partes) me ha convertido en la típica marginada que come sola en la cafetería mientras la gente a su al rededor ríe.

Mi clase

Desde el primer día he acechado a un japonés que iba conmigo a clase pero no parecía mostrar mucho interés en hablar conmigo. De hecho era bastante evidente que yo le daba miedo. No lo culpo. El viernes quedé con una muchacha del colegio y sus amigos y le dije que si quería venirse. Sorprendentemente aceptó. Yo tenía miedo por si no se integraba con la gente porque como es tan callado... y me sentía mal porque pensaba que iba a pasárselo  mal. Bien, pues... poco después de entrar a la discoteca a la que fuimos ya estaba dándolo todo bailando, cantando y hablando sin parar con la gente. Una vez más la marginada era yo. Hoy hemos quedado para comer fideos y por fin he hecho realidad mi sueño de comer comida china en una cajita como la de las películas.

Creo que ya no me tiene tanto miedo. A pesar de que le he dicho que en España nos comemos el animal que más miedo le da: los caracoles. No me preguntéis cómo te puede dar miedo un caracol. Él le tiene miedo a los caracoles, NeoJín a las ovejas y el Homy al jamón york. Nadie es perfecto.

El segundo día me dejé el paraguas en una clase y al día siguiente no estaba así es que me he comprado uno con el cual pienso atravesarle el pecho a la persona que vea que lleva el mío (porque tiene que ser alguien del colegio). Me he comprado el más feo que he visto para que nadie me lo robe.

La ciudad no la conozco aún mucho pero lo poco que he visto me ha encantado. Tiene un globo aerostático, El ojo de Bornemouth (también conocido como El ojete de Voldemort), que me encanta *__* será objeto de miles de fotos.

También tiene muchos parques.

 

Y en ellos ¡hay miles de ardillas! Dios, me caen tan bien... No son tan bonicas como las albaceteñas, pero son más gordas, grandes y sociales. A veces se me acercan y yo me muero de amor.

Aquí todo es tan distinto... (por lo menos con respecto a La Mancha) El clima, las plantas, los insectos, los animales, las nubes, la gente...  Aquí pagan con unos tazos muy raros que no se rigen por la ley no escrita de que las monedas más grandes valen más que las más pequeñas. Y para complicarte más la vida no te ponen lo que valen con un número grande que sea fácil de identificar, no, te lo ponen escrito con letra y bien pequeñico, para que parezcas lerda leyéndolo de cerca cada vez que tienes que pagar. Pero bueno, si aprendí a distinguir los supertazos de los megatazos con un golpe de vista supongo que con esto me pasará lo mismo.

Tampoco acabo de acostumbrarme a que el volante en los coches esté en el lado derecho. A veces voy por la calle y me asusto cuando pienso "¡¡Oh, Dios mío, ese niño está conduciendo!!". Y otras veces es peor "¡¡OH, DIOS MÍO, ESE PERRO ESTÁ CONDUCIENDO!!".

Me ha llamado mucho la atención que los ingleses tengan tantos tatuajes. Creo que el 90% de ellos tienen al menos uno. Me siento un poco marginada por no tener ninguno. Un día de estos me dibujaré algo con un Pilot para sentirme más integrada.

Cerca de mi escuela está la iglesia de Saint Peter que tiene un pequeño cementerio alrededor (cosa que se ve que se estila aquí junto a algunas iglesias) donde, entre otra gente, está la tumba de Mary Shelley.

Combo globo+Saint Peter+Mery Shelley

Me gusta mucho el sitio. Estás en la ciudad, entras ahí y de repente te ves metido en un pequeño bosque lleno de tumbas y cuervos.

Es genial.

Ah, y también hay playa.

 

Termino esta entrada con una pregunta que espero que alguien me conteste porque de otro modo creo que voy a morir joven: ¿en este país dónde están los pasos de cebras? Llevo una semana buscándolos y todavía no los he encontrado por ninguna parte. ¿Cómo es posible?




*Mientras tanto en Madrid 6.000 personas se reunieron ante el congreso para intentar dar un golpe de Estado*