Arancha: Día 166

En un caótico día de mudanza mi madre me dijo "¿Tiro tu naranja?" "¡¡¡NOOO!!! ¡¡¡MI PROYECTO DE CIENCIAS!!!" grité indignada y me la guardé en el bolsillo del pantalón. Cuando llegué a la nueva casa empecé a notar a Aranchita distante e inexpresiva.


Se ve que el permanente es permanente hasta que se roza con la tela de los bolsillos, propiedad que yo desconocía.

No quiero engañaros así es que os diré que se le empieza a notar el inexorable paso del tiempo. Al principio era una naranja prieta y de piel dura pero ahora está más blanda y se le notan los gajos al tacto. Supongo que es normal, al fin y al cabo ya tiene 5 meses, ya es hora de que empezara el ocaso de su vida. Además, esa lesión que tenía en la cabeza (no podía ser en ningún otro sitio) ha empeorado. Me estoy planteando hacerle curas diarias.

Me acabo de quedar mortal. En este preciso instante mi hermana me ha preguntado que si la podía tirar. ¿Casualidad? No lo creo. Como veis ahora se suma un problema más a su vida, esquivar el oscuro cubo de la basura.

¡Como un día aprovechen mi ausencia para tirarla arde Troya!

Comentarios

Sick ha dicho que…
Según la cuenta de la parte de abajo de tu blog, son 166 días. Según tú, 116. ¿Trabajas en El Mundo?
Ángel ha dicho que…
Cris, no estabas a favor de la eutanasia? es hora de tomar una difícil decisión...
B. ha dicho que…
La herida de la cabeza yo creo que más que herida empieza a ser gangrena. Vas a tener que amputar.
Anónimo ha dicho que…
Yo creo que debes darle un digo final.
Cometela igual que hizo Homer con Tenacitas, "Ella lo hubiese querido así"