Estuvo dentro de una señora pero no le fue muy bien con ella y se la quitaron (días después murió u_u). Como iban a tirar la prótesis a la basura me quedé con el tesoro. Y, ¿quién sabe? igual cuando yo necesite una la Seguridad Social no me la paga.
Pensaba que al acabárseme el contrato y por culpa de vuestras votaciones (malditos ¬¬) tendría que irme de la casa de El glande en mano, ¡pero no! Sigo en Alcázar solo que ahora estoy en urgencias, así es que mi consejo a los habitantes de allí es que si se encuentran mal se automediquen o gocen de una muerte digna en sus hogares, ¡no vayan a urgencias! ¡No se les ha perdido nada por ahí!
3 comentarios:
Yo creo que Camilo Sesto hizo un pacto satánico con su muñeco de cera del museo. El muñeco quería vivir como un mortal y poco a poco va envejeciendo, y Camilo Sesto cada año va pareciéndose más a su muñeco de cera. Hasta que llegará el día en que se transforme completamente y su alma maldita quedará encerrada en el museo de cera, y se le oirá gritando "mola maaaaaazo!" por las noches.
Ni Stephen King podría imaginar algo tan terrorífico.
Cómo brilla esa cadera, las personas por dentro debemos estar hechos de Cristasol *__*
Y trabajar en urgencias debe ser muy estresante, nunca sabes quién va a venir con su brazo izquierdo en una bolsa del Pryca ni en qué momento.
Ver a la gente por dentro tiene su encanto (aunque a veces acojonan), pero claro, en mi caso el por dentro no es literal jajaja.
Y yo que este comentario claro, lo hago en mi mente pero luego pasan los días y no te lo he puesto aún xD.
La historia del murciélago ha sido lo mejor. Yo en la mía recuerdo que el murciélago se tiró un rato largo dando vueltas y escornándose contra los muros y eso, pobrecillo. Al rato (largo) se orientó y se fue por donde había venido.
Que vaya bien en urgencias pues, pero no cuentes anécdotas! jajaj.
Publicar un comentario